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sábado, 9 de abril de 2011

El Consejo que Viene del Árbol

Pintado por Alfonso Selgas

Decíamos que se puede estudiar psicología como un curso o una carrera en la universidad, en cualquiera de sus varias técnicas y vertientes, pero los consejos serán del “árbol del conocimiento del bien y el mal”, con lo que se convertirá en una repetición de lo que sucedió en el principio de la creación. Por lo tanto, no sólo no le permitirá a la persona acercarse al árbol de la vida, sino que justamente causará que se interpongan los kerubim y la espada de fuego para “proteger el sendero del árbol de la vida”. Las recomendaciones mezcladas de bien y mal evitan el progreso y encaminarse hacia el objetivo. Lo que estamos tratando de conseguir aquí es llegar a los consejos verdaderos de acuerdo con la Torá.
Otra cosa importante respecto a עץ , etz , árbol, la raíz de etzá , “consejo”. El libro, quizás el más importante que hemos publicado, es Perek Avodat Hashem , “Capítulo sobre el Servicio a Dios”. Como su nombre lo indica, intenta definir qué es servir a Dios. El judío debe ser un obrero. Incluso cuando Hashem puso a Adam y Javá en el Jardín del Edén Primordial, fue explícitamente para eso, para “trabajarlo y cuidarlo”. Hay un dicho que no es de la Torá, al comienzo del libro llamado Shivat Tzión que dice “el servicio es nuestra vida”.
Esto es algo muy cierto, la pregunta es cómo entendemos el concepto avodá , literalmente “trabajo”, aunque en nuestro contexto ser[ia “servicio”. Porque si hay un sendero hacia el árbol de la vida es el sendero del servicio a Dios, el “buen comportamiento” que antecedió a la Torá. No es correcto que no seamos íntegros, perfectos. Tener conciencia de nuestras carencias y de que no actuamos correctamente es la base de la humildad, como lo insinúa la primera toma de conciencia del Mashíaj: “no soy correcto”.
Por eso se necesita trabajar, servicio. Nos referimos al esfuerzo espiritual y físico, tal como está escrito en el Tania, pero para esto también se necesitan reglas e instrucciones para saber qué hacer. Porque el trabajo no es algo alejado de la razón, sino que es un trabajo de raciocinio mental conciente; un esfuerzo duro de la mente para que dirija y domine las pasiones superficiales, los deseos no purificados del corazón. Entonces el lema es “hay trabajar”.
Está el que viene al sicólogo y quiere una solución fácil, y lo primero que hay que saber es que eso no existe. Hay que luchar y trabajar, y eso es duro, pero por medio del trabajo se puede evitar también, incluso en casos muy difíciles, el uso de drogas, etc. No hace falta llegar a tomar tranquilizantes y remedio más fuertes, hay avodá , el servicio a Dios, el servicio espiritual del alma.
La avodá , עבודה , es entonces la ע , ( ain) de la raíz עץ , etz .

Instituto Gal Einai de Israel
Centro de difusión de Cabalá y Jasidut de Rav Itzjak Guinsburgh Shlita

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