La primera huella de la verdadera fé es la que fue grabada en el alma de nuestro primer padre, Abraham, "el primero de todos los creyentes". Este es el secreto de la adquisición de Abraham de la Cueva de Majpelá, el cementerio judío original, por cuatrocientos (el valor numérico de la tav) shekel, el secreto de nuestra herencia eterna de "cuatrocientos mundos de placer", rubricados con el sello de la fé simple.
Instituto Gal Einai de Israel
Centro para la difusión de Cabalá y Jasidut de Rav Itzjak Guinsburgh Shlita
La Dimensión Interior
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